Murió el «verdugo» de Argentina en la final Mundial de 1990. Andreas Brehme, que pateó el penal que definió el torneo en favor de Alemania, falleció a los 63 años por un paro cardíaco, confirmó su pareja, Susanne Schaefer.
Brehme era una leyenda del fútbol alemán, con una destacada trayectoria en equipos como HSV Barmbek-Uhlenhorst, FC Saarbrücken, Kaiserslautern, Bayern Munich, Inter y Real Zaragoza.