En una misma semana el Presidente se peleó con su vice, Victoria Villarruel; atacó a la prensa y se empecina en la defensa de su programa económico, Actúa del mismo modo que lo hacía Cristina Kirchner cuando era jefa de Estado.
Javier Milei es de mecha corta. Cuando algo lo irrite sale enseguida a publicar mensajes en las redes sociales y no mide el impacto de sus dichos, casi como si no tuviera consciencia de que ahora es presidente y sus palabras tienen una repercusión diferente de cuando era un panelista televisivo.
En las últimas horas, esta característica parece haberse profundizado, en especial desde que estalló la interna con Victoria Villarruel, su compañera de fórmula y hoy vicepresidenta, por la convocatoria a la sesión el Senado en la que fue rechazado el DNU 70/2024 que contiene innumerables modificaciones al funcionamiento económico y social del país.
Sin embargo, pese a que quienes manejan las redes sociales del gobierno salieron abiertamente a criticar a la vicepresidenta, Milei negó que esa embestida fuera para Villarruel. «Hubo una interpretación maliciosa del comunicado. El cañonazo fue a la casta, no a Victoria”, aclaró el presidente poco después de que el Senado rechazara el DNU.
Milei se refería al comunicado que el gobierno emitió antes de la sesión del Senado y que advertía: «Ha llegado el momento en que la clase política decida de qué lado de la historia quiere estar”, aduciendo que la posible caída del DNU ponía en riesgo el Pacto de Mayo. Incluso Manuel Adorni -vocero presidencial- desmintió cualquier tipo de enfrentamiento entre el presidente y la vice.
«Infiel» y «traidora»
Pero eso no es lo que se dice en los pasillos y en los despachos de la Casa Rosada, donde se replica el enojo que tanto Milei como su hermana Karina tienen con Victoria Villarroel. El presidente considera que su vice le fue “infiel”, mientras que su hermana la califica de “traidora”.
Ocurre que desde el final de la campaña y desde que los Milei no le dieron a Villarruel lo que le habían prometido respecto de tener injerencia en Defensa y Seguridad, la relación se resquebrajó.
La reunión que la vice tuvo con Mauricio Macri en el verano despertó aún más sospechas, lo mismo que la presencia de la presidente del Senado en cuanto festival hay en las provincias. “Tiene agenda propia”, señalan con el dedo acusador.
Cuestiones «institucionales»
Villarroel en cambio insistió en que se vio obligada a llamar a la sesión del Senado que este jueves terminó con el rechazo mayoritario al DNU, y asegura que lo hizo por cuestiones “institucionales”. Hasta publicó un video en sus redes sociales asegurando que ella no se convertirá en “Cristina Kirchner”, en referencia a que no piensa replicar el modelo Cristina – Alberto en la última gestión.
La «casta» periodística
Sin embargo, quien muestra un comportamiento más similar al de la expresidenta y exvicepresidenta, es Javier Milei. Uno de los puntos que tienen en común es el enojo con la prensa en general y con un medio en particular: Clarín.
«Hay medios que están muy interesados en romper y golpear contra el Gobierno, muy especialmente el Grupo Clarín, que tiene una posición muy adversa y continuamente está operando, calumniando, injuriando y ensuciando”, dijo Milei en una entrevista radial. Y agregó: “No me sorprende que desde ese lugar siempre se haga la peor lectura de los hechos porque ellos también son parte de la casta y se ven afectados y están, obviamente, muy molestos por haber perdido pauta oficial”.
Defensa de la gestión económica
En seguida, se apresuró a defender los resultados de la gestión económica que realizó hasta ahora. “El trabajo hecho desde nuestra gestión nos pone en una situación inmejorable. No solo que somos la primera vez en la historia de un gobierno que alcanza el déficit cero en un mes de gestión en el Tesoro, sino que además cuando contemplas el cuasi-fiscal, que era un déficit de 10 puntos del PBI, lo hemos bajado a 4. En estos 3 meses de gestión, hemos bajado el déficit fiscal en 11 puntos del PBI: 5 en el Tesoro y 6 en el Banco Central», subrayó.
Asimismo, el libertario celebró: «No hay registro histórico de alguien que haya llevado una tarea de estas características y eso nos posiciona muy fuertemente para un nuevo programa con el FMI y con una situación muy favorable”.
Férrea defensa de su plan económico -aún cuando la economía real muestras una tremenda caída del consumo y los salarios perdieron gran parte de su poder adquisitivo-, enojo con su vicepresidente (tal como en su momento le ocurrió a Cristina Kirchner con Julio Cobos) y embestida contra la prensa. ¿Milei se parece cada vez más a la ex presidenta?