Además rechazarían esa concesión Lousteau y el fueguino Blanco, sumados a los 33 del peronismo y los dos santacruceños.
El radical Maximilano Abad adelantó que votará en particular contra el artículo de las facultades delegadas al Poder Ejecutivo y, con su postura, se confirmó que el Senado rechazará el capítulo más importante para el presidente Javier Milei.
Para fundamentar su negativa, expresó: «el gobierno pide facultades delegadas y, para tener facultades delegadas, hay que tener madurez. Y este gobierno se caracteriza por los conflictos y los insultos».
Abad recordó que su partido «no le dio facultades delegadas» a Néstor Kirchner, Cristina Kirchner, Mauricio Macri y Alberto Fernández, y agregó: «Y si no lo hicimos en aquel entonces yo tampoco quiero hacerlo en este momento porque este gobierno tiene que demostrar madurez». «El gobierno tiene que dejar de decir que va a vetar todas las iniciativas que no le gusten porque esas iniciativas son producto de un debate democrático y la representación popular, por eso no voy a acompañar las facultades extraordinarias», concluyó.
Al voto del titular de la UCR bonaerense, se suman el de sus compañeros de bancada Martín Lousteau y Pablo Blanco y los 33 del interbloque de Unión por la Patria. Además, hay que anotar a esa lista a los dos santacruceños, José María Carambia y Natalia Gadano, los patagónicos que se convirtieron en el dolor de cabeza del gobierno.
De esta manera, la oposición reuniría 38 voluntades de piso para voltear la potestad de intervenir en materia legislativa a Milei, pero quedaría lejos de los 48 legisladores necesarios para blindar esa opción con dos tercios.
Al imponerse por mayoría simple, los senadores tal vez sean testigos de la insistencia de los diputados en la versión original, acción para la que solo requerirían 129 votos.
No obstante, la mala praxis política del gobierno que demostraron los santacruceños al anunciar este martes que no darían quórum también provoca un desgaste en la Cámara Baja. La definición de Carambia y Gadano para votar en contra porque Milei ya estaba negociando la sanción definitiva con Miguel Pichetto y Emilio Monzó sin contemplar las modificaciones realizadas este miércoles podría repercutir negativamente en Diputados.
El abuso del Presidente en los ataques contra el Congreso, la erosión de la confianza y la falta de política ya empezó a causar malestar, tal como informó LPO, incluso en el PRO, que fue hasta el momento el partido aliado que más defendió la gestión libertaria.