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En la primera quincena se registraron 300, pero en los últimos siete días se duplicó la cantidad de intervenciones de los bomberos. Cabe recordar que en todo Corrientes está terminantemente prohibido realizar cualquier tipo de quema.
Los incendios se siguen sucediendo no solamente en Capital sino también en todo el interior de la provincia y la gente no entiende que estamos en plena prohibición de quemas en toda Corrientes. La semana comenzó con una tregua y cierto alivio, tras las precipitaciones que se dieron en el sur de la provincia con mayor intensidad que en el resto del territorio.
Ante ello, Bruno Lovison, subdirector de Defensa Civil y coordinador del Comando Operativo de Emergencias (COE) de la provincia, dejó un balance de lo ocurrido el fin de semana «con condiciones de riesgo de incendios muy extremos».
En las primeras tres semanas de este 2025, según Lovison, «Corrientes lleva 620 intervenciones en lo que va del año. Hasta la semana pasada eran 300. El riesgo se incrementó desde el jueves, hasta el domingo inclusive, cuando llovió», explicó el referente.
Pero a pesar de las tantas recomendaciones y advertencias que se dan por todos los medios y redes sociales, la gente, especialmente aquellos que realizan la quema de sus campos, no comprende la combustibilidad que tiene el pasto debido a la poca precipitación en toda la provincia.
Tal es así que ayer, desde la cuenta social de los Bomberos Voluntarios de Saladas, comentaron una triste experiencia que les tocó atravesar en horas de la siesta, cuando la temperatura superaba los 35 grados en la zona conocida como Cuatro Bocas.
«Lamentablemente pareciera que la gente no entiende que está prohibido quemar», iniciaron su relato en la red social Facebook. «Ya tuvimos la mala experiencia del 2022, pero la gente no entiende y lo más triste es que se ponen en riesgo casas, campos, fuentes de trabajo de muchas familias», mencionaban.
«En la tarde de ayer tres dotaciones de nuestro cuartel, apoyados por dos móviles del BRIF (Brigadas de Refuerzo en Incendios Forestales) y un tanque municipal trabajaron a destajo para contener dos incendios en simultáneo en la zona de Cuatro Bocas donde peligraban viviendas y un aserradero», indicaron.
«Gracias a todo el personal, que sin dudar dejó de lado sus quehaceres, obligaciones, tiempo de descanso o de ocio para cumplir con su compromiso autoimpuesto de preservar vidas y bienes, se evitó mayores daños», escribieron en la red social Facebook.
A pesar de los esfuerzos que realizan los bomberos, la negligencia de algunos hace que los incendios se sucedan, lamentablemente, en toda la provincia y hay que agradecer que no hubo víctimas.
Fuente: época
