El entramado político que hay detrás de los Kiczka

La causa que investiga por consumo y circulación de material de abuso sexual infantil a los hermanos misioneros Kiczka abrió en paralelo una ventolera política que escaló hasta lo más alto de gobierno nacional, especialmente cuando una foto trajo un recuerdo reciente: Germán, quien también se desempeña como diputado provincial libertario, había sido recibido a principios de agosto en la Casa Rosada por Eduardo Serenellini. El secretario de Prensa de la Presidencia es un asiduo tuitero, aunque de momento no emitió opinión alguna sobre los motivos de aquella invitación que también incluyó al legislador Pedro Puerta (fundador del partido libertario Activar para el cuál Kiczka reportada) y a Florencia Kipauka Lewtak, única diputada nacional de Misiones por La Libertad Avanza. Para ese entonces, la causa ya llevaba meses en curso y había incluido allanamientos a varios domicilios de la familia investigada.

Aunque el más complicado judicialmente parece ser Sebastián (de quien en un principio su hermano buscó despegarse), es el menor de los Kiczka quien mayor atención arrastró por su rol parlamentario. Y también de quien ahora más intentan desentenderse aquellos que lucían sonrientes junto a él en distintas imágenes. El caso más resonante es el de Patricia Bullrich, que hizo expresa campaña por él en 2021, alentando al electorado misionero a votarlo como diputado misionero, tal como terminaría ocurriendo.

Sin embargo la onda expansiva no se agota únicamente en los círculos nacionales de la Libertad Avanza, frente que en simultáneo encuentra notables problemas para lograr la personería jurídica en las provincias, tarea que Javier Milei delegó en su hermana Karina sin hasta ahora ningún tipo de éxito y con la presión de la cuenta regresiva que se activó de cara hacia las elecciones legislativas del año próximo.

Es que el ámbito misionero parece aprovechar esta causa que investiga los deleznables delitos imputados a los Kickza, pero especialmente a Germán, a quien —por carácter transitivo— el oficialismo le cuenta las costillas en el contexto de una disputa mayor y más añeja: la de Carlos Rovira, líder de Frente Renovador de la Concordia que gobierna la provincia desde 2003, contra Ramón Puerta, su antiguo jefe político. En una saga de alianzas, garrochas y traiciones, Puerta fue el padrino y mentor de la carrera de Rovira hasta que este decidió competirle por el cacicazgo de Misiones, cosa que consiguió tras sucederlo en la gobernación durante el cambio de siglo.

Con Ramón ya retirado de la ambición a los cargos (el último fue la embajada de Argentina en España durante la presidencia de Mauricio Macri, de quien además es íntimo amigo), el legado del denominado Puertismo en la provincia mesopotámica recayó en Pedro, su hijo. Abogado y también empresario dedicado a la industria yerbatera (de la que su familia es una de las principales jugadores de la región), el menor de la dinastía que supo gobernar la provincia durante el menemismo conservaba la esperanza de disputarle el poder territorial a quien, justamente, se lo había arrebatado a su padre: Carlos Rovira.

El primer paso concreto en esa dirección fue la creación de Activar, un partido que inicialmente se encolumnó dentro de Juntos por el Cambio, aunque en los primeros meses de 2024 se reordenó en el esquema de La Libertad Avanza. Esto último supone otro frente de disputa con el Frente de la Renovación, ya que es conocida la alianza que el oficialismo misionero estrechó con el gobierno de Javier Milei tras la visita que realizó a la provincia Guillermo Francos, entonces ministro del Interior, quien se fotografió sonriente con el gobernador Hugo Passalacqua y con Rovira, legislador de manera ininterrumpida desde el fin de su último mandato como magistrado provincial.

Es en esa línea que debe entenderse la escalada que la legislatura misionera inició contra Germán Kiczka en sucesivos pedidos de desafuero y expulsión demorados más de la cuenta, acaso como una forma de extender el tema en la agenda y permitir también el pedido de sanciones no solo contra el diputado (quien, pese a estar detenido, en los hechos todavía sigue detentando su cargo), sino también contra, tal como postularon diversos legisladores oficialistas que piden además una sanción “ejemplificadora” contra el partido que incuba el deseo de despojar al Rovirismo de la escena local.

Página 12

Salió a la luz un chat de Germán Kiczka con una mujer: «Te denuncio

 

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