Drama pasional entre policías: Detalles del brutal ataque en el que mataron al hijo del Jefe de la Policía de Corrientes

Con el correr de las horas se van conociendo más detalles del brutal ataque a balazos ocurrido el sábado, en una vivienda de la localidad de San Cosme y que le costó la vida a Alfredo Molina, hijo del Jefe de la Policía de Corrientes, y causó heridas gravísimas a su novia, Bárbara Romero, perpetrado por David Medina, otro integrante de la misma fuerza.

El atacante habría ingresado a la casa con una copia de la llave y tomó por sorpresa a la pareja que ya se estaba despidiendo. La mujer policía había alcanzado a tomar su arma reglamentaria, antes de ser agredida a cuchillazos. Sigue internada en estado de gravedad.

Todo indicaría que tras ingresar a la casa de la mujer, con una copia de la llave que guardaba en su poder, el atacante sorprendió a la pareja en la pieza, apuñaló a la joven policía, le habría quitado la pistola reglamentaria con la que efectuó los disparos. Los investigadores analizan por estas horas, todos los mensajes de audio y texto que intercambiaron los tres jóvenes policías, las últimas 48 horas antes del hecho. Ayer sepultaron los restos de Molina en San Luis del Palmar.

El hermetismo oficial en torno a la investigación sigue como desde el primer día, al igual que el secreto de sumario. Algunos detalles a los que tuvo acceso diario época provienen de fuentes confiables y reservadas, familiares y camaradas que conocían el contexto previo y posterior a los hechos.

En este sentido se conoció que Medina habría estado enviando mensajes y realizando llamadas previas a su ex pareja, Bárbara Romero, la noche anterior. Ella había salido con amigas y luego retornó a su casa de San Cosme donde la esperaba Alfredo Molina con quien pasó la noche.

Por su parte, Medina estuvo toda la madrugada en un conocido boliche de la avenida Maipú de esta capital donde incluso subió una historia a su red social, cerca de las 6 de la mañana.

De allí se subió a su moto y condujo directo a San Cosme. Al parecer tendría una copia de la llave de la casa de Bárbara, que jamás le devolvió tras la ruptura del noviazgo de casi un año. Con ella logró ingresar a la vivienda, pero no fue tan sigiloso ya que su expareja lo escuchó ingresar. La mujer policía alcanzó a tomar su arma reglamentaria, pero al abrir la puerta de la habitación donde estaba junto a Molina, habría recibido al menos dos puñaladas en el abdomen. El joven ya estaba casi vestido, se estaba por retirar de la casa y al notar lo sucedido habría alcanzado su arma, pero jamás pudo repeler el ataque.

El asesino habría robado el arma de Bárbara y con ella efectuó los disparos, tres tiros le disparó a la joven, uno en la cabeza y dos al cuerpo. Mientras que Molina presentaba dos balazos por la espalda, dos en el abdomen y dos en la cabeza. Los peritos creen que esos fueron los últimos disparos. Luego del ataque, el agresor escapó en su moto cross, pero lo vieron e identificaron algunos vecinos del barrio que escucharon los tiros. Medina se entregó en la Comisaría de Riachuelo. Estaba acompañado de su padre, un comisario mayor retirado. Allí entregó su arma reglamentaria y su teléfono celular. Según trascendió, de esa arma no habría salido los disparos que mataron a Molina e hirieron a Romero.

En tanto, la oficial subayudante, Bárbara Romero, sigue internada en el Hospital Escuela, en estado desesperante. El fin de semana sus familiares hicieron una cadena de oración, mientras solicitaban 24 dadores de sangre para aportar a su recuperación. Los daños por el ataque fueron significativos. Los proyectiles dañaron, pulmones, hígado, tórax y la columna Vertebral, según le dijeron los médicos a la familia. La joven aún continúa en coma farmacológico, mientras intentan sacarla adelante de su cuadro general.

Fuente: Diario época

Muerte del hijo del Jefe de la Policía: Bárbara sigue luchando por su vida

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