Un efectivo con prestación de servicio en la Comisaría Décima de la capital correntina y con historial de incidentes previos fue denunciado por un hombre de casi 70 años por sufrir apremios ilegales tras un incidente vial, sin consecuencia alguna para las partes, con el funcionario en proximidades a la Ruta Provincial N°5.
El hecho ocurrió el 8 de abril y la denuncia fue formulada en la propia Dirección General de Seguridad Metropolitana por la víctima, de apellido Acevedo, quien dijo que salió de trabajar alrededor de las 13 y se dirigía hacia su casa, a la altura del kilómetro 3 de la Ruta Provincial N° 5, cuando dobló, casi colisionó con otra moto que venía en sentido contrario y solo realizó una expresión de asombro por la situación. Nunca hubo contacto entre los motociclistas, pero luego de hacer algunos metros en su viaje notó que otro protagonista lo venía siguiendo a alta velocidad, por lo que aceleró por miedo a que se trate de un robo.
Repentinamente, apareció un patrullero de la Comisaría Décima y fue cuando el otro motociclista logró alcanzarlo, lo bajó a la fuerza de su motocicleta y lo empujó hacia el móvil policial. Tras varios insultos y golpes, lo levantó junto a otro policía y lo tiraron en la parte posterior de la patrulla. Según la denuncia que obra en esta redacción, Acevedo continuó relatando: «Me decía, ya vas a ver lo que te va a pasar en la comisaría. Cuando llegamos, me pegó varias veces en el estómago, luego con el casco en la cabeza y con una alpargata en la cara. Le dije que era una persona mayor y sufría de presión alta y me contestó que no le importaba». Todo esto habría ocurrido frente al comisario Ariel Araujo, jefe de esa dependencia, quien habría dejado seguir la paliza, sin causa aparente, por algunos minutos hasta que decidió intervenir, apartar al funcionario violento. Siempre según la denuncia de Acevedo, una vez en la oficina, el jefe de dependencia le devolvió sus pertenencias y le dijo que se fuera solo a Medicina Legal, donde claramente no fue atendido ya que no llegó en un móvil de la fuerza ni tampoco acompañado por ningún policía.
Tras la denuncia formal en la Metropolitana, la causa fue elevada la Fiscalía en turno para que se abra el correspondiente legajo de investigación y en los próximos días se citará a declarar a las partes. Fuentes reservadas de la Jefatura de Policía indicaron a este medio que están al tanto del incidente y que esperarán la evolución de la investigación y las posibles sanciones podrían aplicarse no solo al efectivo, sino también recaer al jefe de dependencia. Genera preocupación en las autoridades los reiterados casos de violencia en las filas que están siendo denunciados.
Fuente: época