Jose Gauna, responsable del comedor Jardín Botánico habló con el programa Desayuno por Radio Dos sobre la situación que atraviesan golpeados por la crisis y la catástrofe del domingo. Tuvieron que reducir el número de personas que asisten y remarcan que «la pobreza se siente».
«Un desastre total, nos estamos recuperando despacito, haciendo la limpieza, sobre todo, de las máquinas costosísimas, recuperar máquinas o comprar una máquina se hace imposible en este momento», dijo Gauna sobre lo que dejó la catástrofe del domingo.
«Si bien el comedor funciona desde la creación del PAIN, que es Plan de Asistencia Integral a Niños, una ONG con 55 años de historia, comenzó con comedores, hoy tiene muchas escuelas a su cargo, pero sí, nosotros desde el 2001, la otra crisis económica, nos herimos y somos uno de los primeros comedores creados de esa época, a través del desarrollo social de la nación. En estos 22 años, uno tiene por ahí una casa administrativa pero esta vuelta no tenemos esperanza porque ya van tres meses que no recibimos los fondos correspondientes. Funciona el aporte alimentario por parte de la nación y nosotros ponemos las instalaciones y el personal, todo lo que es la logística, para dar de alimentar a veces hasta 150 beneficiarios. En este momento, por razones críticas, hemos reducido, hemos dejado solamente a los niños de 4 a 14 años y algunos que otras personas con capacidades diferentes»
«Los chicos dicen que nos manden que sea arroz con huevo. Y bueno, esas palabras así con el tono, la voz, eso a uno lo pierde, lo sensibiliza. Y bueno, empezamos a movilizar, eso transmitía a la comisión dirigida del país y empezamos a hacer esa campaña de donación de dinero, sobre todo para las compras de carne y una mercadería, para hacer los clásicos guisos con carne, con carne molida o un menudo de pollo también», reveló sobre lo que los motiva a pesar de la critica situación.
«Hoy hemos recolectado 250.000 pesos en efectivo, que nos sirve para seguir para adelante, y mercadería de muchas empresas, inclusive ayer de la Facultad de Ciencia Agraria recibimos también mercadería. Y hay una panadería que nos prometió seguir dándonos días por medio, por lo menos», dijo al agradecer sobre lo recibido tras una campaña solidaria.
«No somos piqueteros, no somos Organización Piquete, nosotros somos una organización social con escuelas a cargo, con comedores, que lo demuestra la historia en esos 55 años, este aporte nacional era para 150 chicos, 150 beneficiarios, de lunes a viernes, en desayuno y almuerzo. Y hoy cada vez nos debimos cerrar un poquito más porque con las necesidades ya de pobreza del año pasado, nosotros empezamos a ampliar un poquito y con la autorización de ellos empezamos a dar a gente también mayores. Claro. Muy humilde, muy necesitada. Y se nota. Empezaron a dar desde hace un año más o menos la forma de vestirse, la forma de presentarse, su estado físico, se nota, se nota la pobreza».